Señores Proenza y Padrón:
Es en momentos de crisis y adversidad cuando se mide la verdadera grandeza de los líderes, y hoy me dirijo a ustedes con el propósito de invitarlos, de manera respetuosa pero firme, a participar en un debate público sobre la situación actual de nuestro municipio de Amancio. Como ciudadanos de este pueblo, conocemos las dificultades que nos aquejan y las múltiples inquietudes que se han expresado tanto en redes sociales como en espacios públicos. No es un secreto que están al tanto de estas quejas; por lo tanto, es tiempo de que den la cara y rindan cuentas al ya lastimado y cansado pueblo.
Un verdadero político no se esconde tras las barreras del poder, ni se evade ante las críticas. Por el contrario, debe ser transparente y valiente, dispuesto a confrontar la realidad que vive su pueblo. Hoy, pareciera que ustedes viven en un universo paralelo, uno donde las publicaciones que emiten en redes están desconectadas de la dura realidad que se respira en Amancio. Sin embargo, el pueblo no es ciego ni sordo. Al contrario, observa y escucha atentamente, esperando con ansias que sus dirigentes actúen con responsabilidad y claridad.
La situación de los apagones ha llegado a niveles insoportables. No es solo el calor abrumador y la invasión de mosquitos que nos impide descansar durante las noches, sino la constante sensación de que Amancio está siendo tratado como un municipio de segunda, donde parece que la política de ahorro energético debe ser cumplida exclusivamente aquí, mientras otros territorios sufren menos. ¿Dónde está la equidad? El pueblo necesita respuestas, no excusas.
José Martí, ese faro de nuestra identidad nacional, decía con justicia: “El pueblo que quiere ser libre, ha de estar bien instruido. Los que han de guiarlo, deben ser transparentes y no dar sombra a sus pasos.” Les recuerdo esta cita porque el pueblo de Amancio necesita líderes que no solo lo representen, sino que lo escuchen, lo respeten y sean parte activa de la solución de sus problemas. Hoy, más que nunca, urge que nuestros dirigentes demuestren que están a la altura de las circunstancias.
Les reto a participar en un debate público, donde se aborden de manera abierta y honesta los problemas de nuestro municipio, con el pueblo como testigo. Será la oportunidad perfecta para que todos veamos cuán preparados están los políticos que nos representan. No les pido nada más que lo que un dirigente debe ofrecer: rendición de cuentas, respeto por la verdad y un compromiso con el bienestar de sus ciudadanos.
Estoy dispuesto a abordar cada uno de los temas que aquejan a nuestro municipio, desde la escasez de alimentos, los problemas con los servicios básicos, hasta las dificultades que enfrentan nuestras familias día a día, incluyendo esta crisis energética que hace nuestras noches interminables. Estoy seguro de que este diálogo abierto será revelador, no solo para nosotros, sino también para la comunidad que les ha confiado su futuro.
Finalmente, no tengo duda de que sus nombres quedarán marcados en la historia de Amancio, y será el propio pueblo quien juzgue sus acciones. Así que guarden bien sus publicaciones y fotos, pues con el tiempo, una vez que sus mandatos lleguen a su fin, el pueblo recordará y juzgará si actuaron con justicia y honor o si se convirtieron en los peores dirigentes que ha tenido este municipio.
Quedo a la espera de su respuesta, con la confianza de que sabrán estar a la altura de la responsabilidad que el cargo les impone.
Atentamente,
Alex